miércoles, 19 de junio de 2013

http://www.revistas.unam.mx/index.php/amicus/issue/view/3091/showToc

Publicación de artículo en Amicus Curiae, revista electrónica de la Facultad de Derecho de la UNAM.
Dejo la liga de la revista Amicus Curiae, donde en su número 2 del volumen 2 de 2013, me han honrado publicándome el artículo "Reflexiones sobre la Filosofía de la libertad y la filosofía de la igualdad", espero sea de interés: http://www.revistas.unam.mx/index.php/amicus/issue/view/3091/showToc

jueves, 6 de junio de 2013

Sobre la legitimación de la autoridad y la división entre gobernantes y gobernados. Respuesta a un alumno de filosofía del derecho.

La etimología de la palabra autoridad nos da la pista su significado; su etimología es una raíz latina: "augere" que quiere decir "crecer", una autoridad es la que cumple con las obligaciones, y deberes, la que responde a nuestra presencia haciéndonos crecer o por lo menos produciendo las condiciones de posibilidad para que podamos desarrollarnos como seres humanos, como personas plenas; una autoridad se deslegitima cuando no produce esas condiciones de posibilidad y se legitima cuando produce por lo menos las mínimas condiciones de posibilidad que son los derechos humanos, por lo que todos los servidores públicos (género) incluidas todas las autoridades (especie de servidor público con facultades resolutivas o de dominio), y todo el Estado en general (incluidos todas las personas particulares), tienen las obligaciones de promover, proteger, respetar, garantizar, los derechos humanos, así como prevenir, investigar, sancionar y reparar cualquier violación a los mismos.

La teoría tradicional del Estado indica que éste se integra por territorio, población, soberanía, orden jurídico y gobierno, y que éste último se divide a su vez en gobernantes y gobernados. Los gobernantes eran las autoridades con facultades ejecutivas o resolutivas, y los gobernados eran los sometidos a esas autoridades gobernantes. En la democracia eso se daba en virtud de que los gobernados se sometían voluntariamente a los gobernantes a los cuales pasaban el poder para gobernar mediante una cesión de derechos. Pero es una visión errónea del Estado. El Estado en principio somos todos nosotros, y en una democracia las autoridades lo son no por una cesión de poder, sino por un mandato con poder limitado para actos de dominio. El poder para ejercer dominio no es un derecho de la autoridad, ni siquiera un derecho cedido por el pueblo, sino una obligación dada por una orden de quien detenta originariamente la soberanía. En la teoría actual hablamos solamente de gobierno, y éste se divide en gobernantes o mandantes, y "servidores" o mandatarios (el presidente es el primer mandatario, el primero que nos hace los mandados); los primeros, no son las autoridades sino el pueblo del que emana el poder o soberanía y que por virtud de un mandato delega poder en sus representantes que son sacados del mismo pueblo por elección popular; estos representantes con autoridad por mandato, no gobiernan, pues no mandan, no son mandantes, son mandatarios, son servidores públicos, y su dominio es limitado al mandato. El mandante, el gobernante, quien "gobierna" es el pueblo. Esta teoría no es ociosa, por más que la realidad la contradiga, pues permite evidenciar que lo que actualmente vivimos en la mayoría de los países de occidente y del mundo, y sobre todo en nuestro país es una farsa; la casta política ha secuestrado el poder, ha traicionado el mandato y se arroga el derecho de gobernar, no la obligación de servir, de hacer crecer y permitir desarrollarse al mandante originario que es el pueblo, las personas, los seres humanos que son la única razón de ser del Estado, la única razón de Estado válida.

sábado, 1 de junio de 2013

GULLIVER EXPLICA EL "ETHOS" DE LA GREY ABOGADIL...


GULLIVER EXPLICA EL "ETHOS" DE LA GREY ABOGADIL "en todas las materias ajenas a su oficio eran ordinariamente el linaje más ignorante y estúpido; los más despreciables en las conversaciones corrientes, enemigos declarados de la ciencia y el estudio e inducidos a pervertir la razón general de la Humanidad en todos los sujetos de razonamiento". CUIDADO QUERIDOS COLEGAS ABOGADOS, ESTO PASA CUANDO SE QUEDA UNO EN EL NIVEL TÉCNICO AL QUE PROPENDE EL MODELO IUSPOSITIVISTA QUE NOS OPRIME Y QUE PROPICIA, ADEMÁS DE LA SANA SEPARACIÓN ENTRE DERECHO Y MORAL, LA INSANA SEPARACIÓN ENTRE DERECHO Y ÉTICA, ENTRE DERECHO Y JUSTICIA, ENTRE DERECHO Y HUMANIDAD, ENTRE DERECHO Y LIBERTAD...

"Díjele que entre nosotros existía una sociedad de hombres educados desde su juventud en el arte de probar con palabras multiplicadas al efecto que lo blanco es negro y lo negro es blanco, según para lo que se les paga. «El resto de las gentes son esclavas de esta sociedad. Por ejemplo: si mi vecino quiere mi vaca, asalaria un abogado que pruebe que debe quitarme la vaca. Entonces yo tengo que asalariar otro para que defienda mi derecho, pues va contra todas las reglas de la ley que se permita a nadie hablar por si mismo. Ahora bien; en este caso, yo, que soy el propietario legítimo, tengo dos desventajas. La primera es que, como mi abogado se ha ejercitado casi desde su cuna en defender la falsedad, cuando quiere abogar por la justicia -oficio que no le es natural- lo hace siempre con gran torpeza, si no con mala fe. La segunda desventaja es que mi abogado debe proceder con gran precaución, pues de otro modo le reprenderán los jueces y le aborrecerán sus colegas, como a quien degrada el ejercicio de la ley. No tengo, pues, sino dos medios para defender mi vaca. El primero es ganarme al abogado de mi adversario con un estipendio doble, que le haga traicionar a su cliente insinuando que la justicia está de su parte. El segundo procedimiento es que mi abogado dé a mi causa tanta apariencia de injusticia como le sea posible, reconociendo que la vaca pertenece a mi adversario; y esto, si se hace diestramente, conquistará sin duda, el favor del tribunal. Ahora debe saber su señoría que estos jueces son las personas designadas para decidir en todos los litigios sobre propiedad, así como para entender en todas las acusaciones contra criminales, y que se los saca de entre los abogados más hábiles cuando se han hecho viejos o perezosos; y como durante toda su vida se han inclinado en contra de la verdad y de la equidad, es para ellos tan necesario favorecer el fraude, el perjurio y la vejación, que yo he sabido de varios que prefirieron rechazar un pingüe soborno de la parte a que asistía la justicia a injuriar a la Facultad haciendo cosa impropia de la naturaleza de su oficio. »

Es máxima entre estos abogados que cualquier cosa que se haya hecho ya antes puede volver a hacerse legalmente, y, por lo tanto, tienen cuidado especial en guardar memoria de todas las determinaciones anteriormente tomadas contra la justicia común y contra la razón corriente de la Humanidad. Las exhiben, bajo el nombre de precedentes, como autoridades para justificar las opiniones más inicuas, y los jueces no dejan nunca de fallar de conformidad con ellas. »Cuando defienden una causa evitan diligentemente todo lo que sea entrar en los fundamentos de ella; pero se detienen, alborotadores, violentos y fatigosos, sobre todas las circunstancias que no hacen al caso. En el antes mencionado, por ejemplo, no procurarán nunca averiguar qué derechos o títulos tiene mi adversario sobre mi vaca; pero discutirán si dicha vaca es colorada o negra, si tiene los cuernos largos o cortos, si el campo donde la llevo a pastar es redondo o cuadrado, si se la ordeña dentro o fuera de casa, a qué enfermedades está sujeta y otros puntos análogos. Después de lo cual consultarán precedentes, aplazarán la causa una vez y otra, y a los diez, o los veinte, o los treinta años, se llegará a la conclusión. »

Asimismo debe consignarse que esta sociedad tiene una jerigonza y jerga particular para su uso, que ninguno de los demás mortales puede entender, y en la cual están escritas todas las leyes, que los abogados se cuidan muy especialmente de multiplicar. Con lo que han conseguido confundir totalmente la esencia misma de la verdad y la mentira, la razón y la sinrazón, de tal modo que se tardará treinta años en decidir si el campo que me han dejado mis antecesores de seis generaciones me pertenece a mí o pertenece a un extraño que está a trescientas millas de distancia. »

En los procesos de personas acusadas de crímenes contra el Estado, el método es mucho más corto y recomendable: el juez manda primero a sondear la disposición de quienes disfrutan el poder, y luego puede con toda comodidad ahorcar o absolver al criminal, cumpliendo rigurosamente todas las debidas formas legales.»

Aquí mi amo interrumpió diciendo que era una lástima que seres dotados de tan prodigiosas habilidades de entendimiento como estos abogados habían de ser, según el retrato que yo de ellos hacía, no se dedicasen más bien a instruir a los demás en sabiduría y ciencia. En respuesta a lo cual aseguré a su señoría que en todas las materias ajenas a su oficio eran ordinariamente el linaje más ignorante y estúpido; los más despreciables en las conversaciones corrientes, enemigos declarados de la ciencia y el estudio e inducidos a pervertir la razón general de la Humanidad en todos los sujetos de razonamiento, igual que en los que caen dentro de su profesión."

Fragmento, Los viajes de Gulliver de Johnathan Swift, Parte IV, Capítulo 5